En el día de hoy se llevó a cabo la formal entrada en funciones de Florencia Palomo como Directora de Género y Fortalecimiento Familiar, luego de su paso por Casa del Niño. Asimismo, se ha integrado el equipo -en algunos casos con trayectoria en el área- con la Trabajadora social y comunicadora Genoveva Peralta; la Psicóloga Mariana Resa; la Abogada Natalia Dell´Antonio y la Pasante de Derecho Carolina Ibarra.
En la mañana de hoy, el intendente Interino, Pablo Pino, junto al Director de Gobierno, Gonzalo Villalonga y a la Secretaria de Desarrollo Social, Sabrina Scarpeccia, pusieron en funciones a Palomo, además de dialogar sobre las políticas de género a desarrollar desde el Municipio, en concordancia con lo que ocurre en Nación y Provincia y con la normativa vigente.
En ese sentido, se pusieron sobre la mesa factores como la conflictividad de los vínculos que caracterizan estos tiempos; la naturaleza vincular, que tiene algunas situaciones como la violencia en el noviazgo como antecedentes de lo que luego se constituye en una relación signada por la violencia. O los casos de violencia que han sacudido a nuestra comunidad, a partir de los cuales se multiplican las denuncias.
En ese sentido, el área intervino en 187 casos en nuestra ciudad durante 2019, sabiéndose que son otros tantos los casos en donde no existen denuncias. También se han incrementado notoriamente los casos de abuso sexual.
Se plantea, a partir de ello, la necesidad del trabajo en red, con instituciones sociales y deportivas, para hacer relevamientos y actuar en conjunto. “Nosotros tyrabajamos con la voluntad de cada persona, no podemos obligar a nadie”, afirma Florencia. Incluso, aún cuando existen casos de años de maltrato y de relaciones violentas. Es más: “aunque la justicia lo ordene, no podemos avanzar en la obligatoriedad de tratamientos o terapias, porque sigue siendo privativo de la decisión de cada persona”, señalan.
“Es un proceso social, de deconstrucción”, afirma Florencia Palomo. El Estado es responsable de motorizar esas políticas y sostenerlas en el tiempo. Los tiempos cuentan.
En ese sentido, se pusieron sobre la mesa factores como la conflictividad de los vínculos que caracterizan estos tiempos; la naturaleza vincular, que tiene algunas situaciones como la violencia en el noviazgo como antecedentes de lo que luego se constituye en una relación signada por la violencia. O los casos de violencia que han sacudido a nuestra comunidad, a partir de los cuales se multiplican las denuncias.
En ese sentido, el área intervino en 187 casos en nuestra ciudad durante 2019, sabiéndose que son otros tantos los casos en donde no existen denuncias. También se han incrementado notoriamente los casos de abuso sexual.
Se plantea, a partir de ello, la necesidad del trabajo en red, con instituciones sociales y deportivas, para hacer relevamientos y actuar en conjunto. “Nosotros tyrabajamos con la voluntad de cada persona, no podemos obligar a nadie”, afirma Florencia. Incluso, aún cuando existen casos de años de maltrato y de relaciones violentas. Es más: “aunque la justicia lo ordene, no podemos avanzar en la obligatoriedad de tratamientos o terapias, porque sigue siendo privativo de la decisión de cada persona”, señalan.
“Es un proceso social, de deconstrucción”, afirma Florencia Palomo. El Estado es responsable de motorizar esas políticas y sostenerlas en el tiempo. Los tiempos cuentan.
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